EL FLECHAZO

En el Hotel Chao de Villalba, que era del abuelo de Manu Chao, el comemierda del grupo Pata Negra, el 12 de septiembre de 1955, se abrió la puerta del comedor donde se celebraba mi 11 cumpleaños, y apareció un chico rubio con pantalón gris y camisa azul celeste, todo alrededor de él, se eclipsó mientras se acercaba a mi, no vi a nadie en la sala, era Vicente, ya sabéis, me pase la fiesta muy nerviosa, mas tarde le pregunte a papa quien era y me dijo que de pequeños habíamos jugado mucho, era el hijo de los Soto, vivían en Madrid y veraneaban en Villalba en un chalet frente a la Oficina de Correos, aquel año solo le volví a ver 2 ó 3 veces montando bicicleta, ya que se estaba terminando el verano y se iban para Madrid, nosotros también marchabamos a Madrid. Ya en Madrid, me gustó la casa de la calle Espronceda, teníamos un vecino republicano que era médico y tenía 2 hijos de nuestra edad, se llamaba D. Mariano Moreno, mas tarde fue médico de Larrea, un jefe de CAMPSA, y mas de 1 vez Benito (papa) y yo íbamos a casa de D. Mariano para que hablara con Larrea y pedir un barco que le conviniera a papa. Marianito iba también al Ramiro de Maeztu, Rosita, la niña, estudiaba en el Liceo Italiano, congeniamos muy bien pasábamos mucho tiempo una en casa de la otra. Mi colegio también me gustó, lo que jodía era que Maruja me fuera a busca y llevar, cuando todas mis compañeras se iban a casa solas, a veces salía y hacia que no la veía y siempre discutiendo...¡Pobre Maruja! ahora me doy cuenta de lo importante que fue para mi.
La vida transcurría feliz, los sábados íbamos al cine Coliseum a ver 2 horas de Tom y Jerry o al cine Colon que quedaba en la calle Génova, alli daban 2 películas y a la salida nos venían a buscar papa y mama e íbamos a cenar a una cafetería que se llamaba California, los domingos íbamos al Retiro a las lanchas o al Parque del Oeste, o a El Escorial o a Toledo, Segovia, ese Madrid era maravilloso, entonces si se podía decir "De Madrid al cielo".

En noviembre los viejos fueron a Francia a comprar un coche pues este viaje no trajimos el "haiga", allí salía mas barato y trajeron un Simca gris, luego tras 2 años fue lo del tiburón naranja, ya sabéis que abuelo era daltónico, y no veía los colores, asi era que, a veces, cuando mama no le ponia la ropa encima de la cama tras asearse, se ponía un calcetin de cada color. Fue solo a Francia y pidió un coche gris, como no hablaba francés, seguro que le dijeron que no había gris y le daban uno naranja, y el diría gui gui tre bian....jejej....el caso es, que aparcó delante de casa, era un primer piso, subió, abrió la puerta, nos saludo y dijo.- Miren que gris mas bonito tiene el coche....¡Que barbaridad era de un naranja chillón!!, Mi viejo era la hostia, era de vergüenza cada vez que aparcábamos, la gente hacía corrillo alrededor del cochecito creo que era el único de ese color, que había en Madrid.

Al terminar el invierno hicimos las maletas para ir a Villalba, salíamos a las 3 de la tarde para parar a dormir en La Bañeza y al día siguiente pasar Piedrafita por la mañana, las carreteras eran de aupa, ese verano no iríamos al Hotel Chao, mis padres, habían alquilado una casa, cuando paró el coche frente a la casa, me quede de piedra, ¡Que alegrón me di!!!!!... La casa que habían alquilado estaba encima de la Oficina de Correos, justo enfrente de la casa de Vicente........ El destino, caprichoso.

PARÉNTESIS

Hoy no me siento muy inspirada, quizá es, que me siento frustrada, y triste, yo siempre soñé hacer muchas cosas importantes en mi vida, pero siempre me he ido por el camino que no debía haber seguido, pero mas allá de mis circunstancias, también he de reconocer que me ha tocado vivir una vida que no esperaba, esto, le pasa a mucha gente, no estoy contenta, lo único de lo que me siento orgullosa es de haberos parido y haber tenido la suerte de que seáis como sois. Gilipolleces aparte sigo con mi relato.

Mi primera Comunión

Corría ya el año1952 en el cual hice mi Primera Comunión, yo era y soy muy mística, como buena nativa del signo Virgo, perfeccionista y en fin todo lo demás que describe mi signo, así que fue un día muy feliz, era mi primera transformación, me regalaron un rosario de oro con perlas de verdad, que luego perdí no se como, era estudiosa pero no día a día, creo que era inteligente pues con una pasada a los libros, aprobaba siempre, también estudié Ballet y Piano, mama quería que hiciese lo mismo que ella y lo hice.

Tere y yo, tras operarme de Apendicitis.

Así llegamos al año 1954 en el que me operaron de Apendicitis y ya papa tramaba venir a España para que estudiásemos aquí durante 4 años, así que al cumplir 10 años me hicieron una fiesta en Tarará, la peli que pase de 8mm a vídeo, luego me operaron y en marzo del 55 embarcamos en el Guadalupe para España. Tras 18 días de travesía, parando en New Port News (Virginia) donde pasamos 2 días, tocamos New York, estuvimos también 2 días, el viaje desde New York a La Coruña fue una gozada, a Maruja se le infectó una uña del pie derecho, mama andaba coja pues el día anterior a embarcar, secándose después de ducharse, al poner la pierna encima del inodoro, y estar la tapa levantada, resbaló y se metió la pierna dentro de la taza del inodoro con el consabido moretón, que tras los 5 días que llevábamos abordo le empezaba a doler y no se movían ni Maruja ni ella del camarote de mis padres, y por último, papa tuvo una faringitis al salir de New York, le inyectaron penicilina, papa era alergico a la penicilina, terrible olvido, así que se puso como una pelota, ¡¡De puta madre!!!, Kiko y yo eramos libres por todo el barco y hacíamos lo que nos daba la gana, pero eso solo duro una semana.

La Fiesta del Capitan. M/N Guadalupe

Al fin, llegamos a La Coruña, pasamos 15 días en el Hotel Embajador que estaba frente a la Estación Maritima, donde está La Diputación ahora, nos quedamos con Maruja mientras ellos fueron a Villalba y a Madrid a buscar sitio para asentarnos en el invierno y buscar colegio, papa habló con Fraga que entonces trabajaba con Ruiz Jimenez que era Ministro de Educación y le pidió consejo para escolarizarnos, a Kiko le recomendó el Instituto Ramiro de Maeztu y para mi Las Teresianas, luego encontraron un piso en la calle Espronceda, en el barrio de Chamberí, cerca de La Castellana y del Ramiro de Maeztu, así que ya estábamos en camino de nuestra nueva vida en Madrid.

Esta es la casa en la que vivimos durante cuatro uinviernos, en el primer piso de la calle Espronceda que hace esquina con Modesto Lafuente. En esta casa pasamos momentos muy buenos y nos quedaron para siempre recuerdos entrañables, sobre todo con algunos vecinos.