ADIOS....TERE

Kiko se había ido, Maruchi, también... y ahora era Tere la que se iba para España, hacía solo un año y medio que habíamos regresado y ya me quedaba sola de nuevo.
En Cuba, la gente empezaba a mandar a sus hijos fuera del país, se organizó una operación clandestina que denominaron "Operación Peter Pan", consistía en buscar familias en Los Estados Unidos que recibieran a chicos y chicas cubanos entre 12 y 16 años, temporalmente, supongo que, para ver que rumbo tomaba la nueva situación en Cuba, se produjo un éxodo masivo de jóvenes, algo parecido a lo que en España se produjo cuando la Guerra Civil, "Los niños de la Guerra" que fueron llevados a Rusia. Aquella situación no podía durar por mucho tiempo, estaban nacionalizando toda la industria, comercios, colegios y militarizando al país, la gente sospechaba que alguien pondría fin a esa actitud de los nuevos gobernantes, además, los jóvenes se estaban implicando en movimientos de contrarrevolución y corrían peligro. Ellos se quedarían en Cuba y mas tarde....ya se vería.
Así es, que Tere se iba para España y nada menos que a La Coruña, le conté como era la ciudad, que le iba a gustar y que la gente era muy animada y quizás la ciudad le recordaría a La Habana. Tere estaba ilusionada y contenta, iría a casa de un hermano de su padre que era militar y vivía en la Avenida de Finisterre, empezamos a preparar su salida. Tere pasaría por Madrid y estaría unos días, aproveche para darle la dirección de Vicente y su teléfono, con la intención de que lo conociera, ya que yo le había hablado mucho de él.
Llegó el 28 de diciembre y Tere se marchó, el avión tuvo una avería y estuvieron en Las Azores, creo, mientras reparaban el avión. Llegó a España, era Navidad, su familia conocía a una actriz de teatro y me contó que el día 31 habían tomado las uvas en el teatro, en medio de la función. También llamó a Vicente y el con sus hermanos y Manolito, su primo, fueron muy amables con ella. Yo sentí envidia, me moría de ganas de estar allí.
Me había matriculado ya para cursar el último curso de Diseño y Dibujo Comercial y seguía mi vida, ahora pasaba mucho tiempo con Silvia y con Aurorita, a la que había conocido en Villalba porque habían hecho un viaje a España y coincidimos un tiempo, nuestros padres se conocían ya. Con Aurorita, íbamos a nadar y a pasar tardes al Casino Español, que era un Club filial del Centro Gallego, allí pasábamos muchas tardes.

3 comentarios:

beni dijo...

Ahora si que si... no pares... sigue porque parece un cuento de hadas que quiero leerles a mis hijos el dia de mañana... pero seguro que tienes muchas mas anecdotas... tengo la impresion de que vamos muy rapido......Te quiero mucho mamita...

beni dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Tere, hija dijo...

Coincido con Benito, es como si fuera un cuento, escrito con mucha serenidad, dulzura, sencillez y mucha, mucha ternura. Me alegro muchísimo de haberte vuelto a ver y de ver que sigues con el blogg. Estoy pasando una tarde de domingo estupendísima gracias a tí.
Tere,hija