1963 II

Tere y yo por las calles de La Coruña.
A pesar de la frialdad de Vicente, mi vida seguía transcurriendo. De vez en cuando, me asaltaban pensamientos, pero los descartaba rápidamente, al fin y al cabo si su silencio se debía a que ya no sentía por mi lo que yo había pensado, nadie tiene el derecho de exigir unos sentimientos que no existen, a otro. Trataba de distraerme y lo conseguía, en el trabajo ampliamos la agencia, ya no nos dedicábamos solamente a hacer anuncios, José Luís Dorrego se había buscado un socio que era el jefe de publicidad de una empresa bastante importante, por aquel entonces, de La Coruña. Manuel Caamaño, era el nombre del nuevo socio, era un hombre muy innovador, tenía grandes ideas y experiencia, así comenzó la nueva agencia que ahora se llamaría "Publicidad Eficaz". Pronto empezó a venir gente nueva, dos escaparatistas, un delineante, otro dibujante..en fin aquello tomaba cada vez mas cuerpo....ya no tenía que ir a la radio ni al periódico a llevar las ordenes de publicidad, ya teníamos un chico de recados que haría ese trabajo.Todo tomó un ritmo frenético y se trabajaba mucho, hacíamos todos los escaparates de la Calle Real, que por entonces era el centro comercial, junto con San Andrés, que había en La Coruña, incluso hicimos una revista sobre la ciudad que se llamó "Galícia 63" que aunque pasó sin pena ni gloria, para nosotros supuso un reto importante.
Aquel otoño de 1963, cuando fui a pasar unos días a Villalba, noté que la gente me miraba y hablaban entre si, parecía como si me tuviesen pena, al llegar a casa de Bouza, les conté el extraño comportamiento de la gente hacia mi.....entonces Bouza, me indicó que subiese a su despacho con el, tras cerrar la puerta me mando sentar y muy serio comenzó a relatar lo que creía que pasaba: -Mira Tellita; aunque no es fiable, existe un rumor de que papa fue hecho preso y asesinado por el G2 (férrea policía del régimen)y hasta verificar este rumor no tengo intención de desvelarlo. Estoy en contacto con los amigos de tu padre de Asturias que todavía quedan en Cuba, cálmate, en cuanto sepa algo, no dudes que te lo contare. Mi padre, al que adoraba, era el baluarte de toda la familia, enseguida pensé en mamá, sola en La Habana y sin él y mi angustia fue terrible, llamamos a González a Salas (Asturias), él ya tenía noticias de lo que había pasado, pues tenia un sobrino en la Policía, un alto cargo y nos tranquilizó al decirnos que ya todo había pasado y estaba aclarado.
Esto fue lo que pasó: Mi padre, siempre había dicho, que lo que había conseguido con su trabajo de tantos años en la isla, debido a su sacrificio, no lo entregaría, ya que todo el que salía de Cuba teniendo propiedades, tenía que renunciar a ellas y así lo hizo, sacándonos a mi hermano y a mi de Cuba, hasta que, le quitaran todo.
Papá, tenía un primo que era piloto de Iberia, no era la primera vez, que en petacas de puros le había sacado varias, llenas de piedras, sobre todo diamantes, oro y todo lo que podía conseguir deshacer el orfebre, para después colocar poco a poco joyas que conseguian y chapaban de oro, en los mostradores, un trabajo de chinos. Por aquellos días, como la gente salía a montones de la isla, los que tenían dinero, compraban joyas que fueran pequeñas pero valiosas, esas, estaban en la caja fuerte e iban saliendo poco a poco, así fue, como se las arregló mi viejo para poder sobrevivir, ya que las cuentas del banco, estaban congeladas e intervenidas. Las petacas, al llegar a Madrid, eran llevadas al Banco de La Coruña, que entonces se llamaba así, antes de que pasara a ser Banco de Bilbao y en donde el hermano de Luis Bouza era el Director. En la caja fuerte del despacho de Emilio Bouza, reposarían.... En Cuba, la policía sospechaba de este piloto, ya que cada vez que llegaba de España visitaba "La Sultana" y por el parentesco, para con papá. A los tripulantes de compañias extranjeras no se les solía registrar, pero por lo que fuera este chico fue registrado y le encontraron este paquetito. Él dijo, que le había dado el paquete un señor que no conocía, diciéndole que eran habanos y el por su buena fe lo había cogido, al ser español simplemente tuvo que entregar el paquete y nada más. Como se puede apreciar, la policía cubana estaba muy al día sobre la investigación, los cubanos, aun ahora, se espían unos a otros. Papá estuvo 3 días allí preso y sometido a interrogatorio. Al tercer día, también por mediación de un amigo que tenía, ya se sabe, apareció por allí y logro que lo soltaran. Tras 3 días de oscuridad, hambre, sed y por supuesto sin haber podido fumar, respiró profundamente y estuvo mucho tiempo en la puerta, sin moverse, disfrutando de la libertad y pensando que se había librado de una buena....Cuando cerca de él, escuchó hablar a dos milicianos que refiriéndose a el decían: -Hay que ver "compañero" tremendo carro tiene este "galleguito"!!, Papa al oir esto, se dirigió hacia ellos y les dijo: -Así que les gusta el carro ¿No?... A lo que ellos respondieron: -¡Caballero!, como no, tremenda maquina!....Papa sin pensarlo un segundo, abrió el coche, cogió la documentación y mirándoles a la cara, les dio documentación y llaves, diciéndole a uno de los milicianos: -Se lo regalo, aquí está todo lo que necesitan...... Sin mas, comenzó a caminar con toda la dignidad de la que era capaz, rumbo a una parada de autobús ansiando llegar a casa para ver como estaba mamá, que conociéndola (pensaba él) habría revuelto La Habana con todos sus pobres habitantes, ya que él no había podido ni siquiera hablar por teléfono con ella. Una vez que ya tranquilos los dos, se compraron un coche ruso que les duró hasta que pudieron salir. De todo lo anterior, me enteré muchos años mas tarde. Naturalmente....

No hay comentarios: